LA CHANCHA Y LOS 20…Y LA MAQUINA DE HACER CHORIZOS

De Duilio O. Lanzoni

EL PROFESOR
(En escena, Roberto, el profesor. Sentada en postura de aburrimiento y tristeza, está María. Ingresa Lucas)
LUCAS: Buenas…
ROBERTO: Buenas tardes, señor. (María apenas saluda con la cabeza)
LUCAS: Discúlpeme… ¿Usted es el profesor de tango?
ROBERTO: Así es…
LUCAS: ¿Usted me enseñaría tango?
ROBERTO: Si, dado que soy el profesor de tango no quiero enseñarle otra cosa que tango. Imagínese que yo le enseñara Ciencias Políticas o Administración Empresarial, ¿cómo le explicaría a sus amigos que aprende esas materias en la academia de tango? Lo que es peor la gente empezaría a pensar que el tango es una ciencia política o, al menos, una herramienta indispensable para llevar la administración de su PYME.
LUCAS: ¿Eso quiere decir que si, en definitiva?
ROBERTO: Pare mano tallador, que no cualquiera entra acá y dice, quiero aprender tango y yo le enseño… El tango es una ciencia difícil, intricada, pasional, casi esotérica, le diría y no le voy a estar enseñando a cualquier burgués que no sabe que hacer con su tiempo y decide aprender… Porque le voy a decir algo, mi amigo, decidir aprender no es aprender…Para aprender a bailar tango, hay que entregar el alma…
LUCAS: No, si yo…
ROBERTO: Primero: ¿le gusta el tango?
LUCAS: Claro, si no…
ROBERTO: No tan claro, no me retroceda en chancletas que se va a dar un porrazo… ¿Cómo sabe que le gusta el tango? ¿Lo dejó una mina? ¿Es porteño? ¿Es japonés o nació en Finlandia? ¿Se siente invadido por nostalgias y no sabe por qué? ¿Se ha batido a duelo a cuchillazos? ¿Lee a Borges? Lo noto sorprendido… no si no es para todos… Yo le voy a dar a usted un formulario con 200 preguntas, un múltiple choice, en la próxima clase usted lo va a traer completo y luego de eso yo lo voy a evaluar para determinar si a usted le gusta el tango…
LUCAS: ¿Para tanto? Yo…
ROBERTO: ¿Y para qué quiere bailar tango?
LUCAS: Bueno, es una forma de arrimarse a las mujeres…
ROBERTO: ¡Hubiésemos empezado por ahí! Usted, mi querido señor… ¿cómo es su gracia?
LUCAS: No tengo ninguna, por eso quiero aprender tango…
ROBERTO: Bueno… encima es boludo…¿cómo se llama?
LUCAS: Lucas.
ROBERTO: Mi querido señor Lucas… si usted quiere aprender tango para levantarse minas, caben dos posibilidades…o recién se escapó de la pava en dónde vive porque le levantaron la tapa, o se bajó recién de una máquina del tiempo… ¿usted es, o se hace? Querido, lo invitaría a que vaya a cualquier boliche, cualquier noche, invita a bailar a una señorita y usted baila tango al son de la cumbia villera… ¿Cómo le parece que se vería?
LUCAS: Es que… la chica que me gusta, es fanática del tango…
ROBERTO: ¿Canaro, Piazzolla, D’Arienzo, Pugliese?
LUCAS: No, del Gotan Project…
ROBERTO: ¿De qué?
LUCAS: El Gotan Project, un grupo que hace tango electrónico…
ROBERTO: ¿Pero qué me dice? El tango electrónico no existe, querido… Decir tango electrónico es como hablar del sexo virtual, el tango electrónico es una falacia en si misma. Imagínese a Gardel, o a Julio Sosa, o al Polaco mismo, procesando sus voces con esos aparatitos nuevos que impiden que uno desafine… No me venga con eso, querido…
LUCAS: Bueno, pero a ella le gusta…
ROBERTO: Usted me dice que si a ella le gustara tejer al crochet, usted hubiese terminado en una academia de corte y confección…
LUCAS: Bueno, no, a mi en el fondo, también me gusta el tango… Está bueno, es sensual, es nuestro, que se yo…
ROBERTO: Es cierto… en eso tiene razón…
LUCAS: ¿Me enseña, entonces?
ROBERTO: ¿Ve a esa señorita allí?
LUCAS: Si.
ROBERTO: Bueno, hace 2 meses y 10 días que viene cada día esperando para empezar…
LUCAS: Todos los días? ¿Y no empezó a enseñarle aún?
ROBERTO: No, no sea necio… Le enseño desde entonces…Ella aún no ha bailado, pero primero tiene que aprender a sufrir, tiene que desarrollar la paciencia, tiene que aprender a ser basureada… Porque en el tango, querido amigo, la mina acompaña… Y para acompañar hay que saber esperar…
LUCAS: La mierda.
ROBERTO: ¿Y usted, tiene una mínima idea de cómo bailar?
LUCAS: Bueno.. algo, de ver…
ROBERTO: Muéstreme.
LUCAS: Así, ¿acá, ahora, en seco, digo sin música?
ROBERTO: Claro…
(Lucas duda y ante la mirada imperiosa de Roberto, ensaya unos pasos)
ROBERTO: Lamentable. Absolutamente lamentable… Le digo la verdad, de solo mirarlo ya es como que tengo ganas de dejar la intención de enseñarle… Por otra parte, mi querido…el tango es de a dos… Saque a bailar a la señorita… Vaya… No sea tonto… (Lucas va hacia ella, que se para como impelida por un resorte y se le echa encima) Pero no, por favor, ¿qué están haciendo? Se empieza a bailar desde el momento en que comienza la seducción para convencer a la compañera…Y usted, mi querida María, no sea tan fácil.
MARIA: Discúlpeme, profesor, me mata la ansiedad… No sabe las ganas que tengo de bailar el tango…
ROBERTO: Empiecen de nuevo…
LUCAS: ¿Bailamos?
MARIA: ¿A mi me dice, caballero?
LUCAS: Si, señorita, a usted le digo… Es la única dama presente, por otra parte…
MARIA: No se qué decirle, me compromete…
LUCAS: ¿Cómo que la comprometo?
MARIA: Y… sacándome a bailar… ¿qué va a pensar la gente?
LUCAS: Pero si estamos solos, con el profesor…
MARIA: Peor… imagínese qué va a pensar el profesor…
LUCAS: Nada, si él me mandó a sacarla a bailar…
MARIA: Ay, no se, joven… quizás en otro momento…
(Lucas se da vuelta y mira desconsolado a Roberto)
ROBERTO: Bueno… muy bien… ahora lo mismo, pero sin palabras… Y usted, María…salga, no lleve las cosas al extremo. (Repiten toda la acción anterior con gestos. Quedan en posición de baile. Esperan ansiosos lo que diga Roberto) Bien… bastante bien… Ahora… Analicen sus chacras… penetren en sus yo energéticos y cuando suene la gloriosa música del tango, déjense llevar…Asi… (Roberto hace algunos pasos… Suena un tango… Lucas intenta imitar lo hecho por el profesor, pero María comienza a bailar como si se tratara de salsa)
LUCAS: ¡Profesor! ¿qué hace?
ROBERTO: Pare, pare, está loca o qué… ¿Por qué mueve el trasero así, qué está bailando?
MARIA: Usted me dijo que me dejara llevar…
ROBERTO: Si, pero se dejó llevar a Cuba, mas o menos…¿qué le pasa?
MARIA: Bailo lo que me sale, profesor…
ROBERTO: ¿Y usted, mi querido, qué es eso de mirarme casi lloroso, pidiéndome ayuda…? No, señor… Si la mina no da bola, cachetada de ida y si sigue retobada… cachetada de vuelta…¿me entendió?
LUCAS: Pero, ¿cómo le voy a pegar a una mujer?
ROBERTO: Ah, ¿no puede?
LUCAS: Claro que no…
ROBERTO: Entonces, estamos jodidos… Usted señorita, no aprendió a esperar… y encima es mas bailantera que tanguera… le voy a ser sincero… Y usted, querido amigo, es un pusilánime… Si no es capaz de despeinar a una mujer de una cachetada, el tango no es para usted… Lo siento.
MARIA: Perdón profesor, por haberle hecho perder su tiempo…
LUCAS: Discúlpeme, no sabía que yo era un flojo, se lo juro. Le prometo que salgo de acá y voy al psicólogo…
ROBERTO: Vayan, queridos, vayan…
(Suena una salsa y ambos se van bailando en trencito)
ROBERTO: No hay caso… el tango está muriendo.

QUE ME MIRA

(Dos señores de anteojos oscuros miran hacia el frente de la escena. Están a unos tres pasos de distancia. Se perciben)
SEÑOR 1: Tengo la mala impresión de que el señor me está mirando. (Sin dirigirle nunca la mirada)
SEÑOR 2: A decir verdad, si de impresiones hablamos tengo la muy mala impresión de que el señor me mira a mi. (En igual actitud)
SEÑOR 1: Yo le voy a decir algo, soy tranquilo, manso le diría casi… Si voy en un bondi y hay quien me apoya, yo no le hago lío… despacito me corro. Si voy acompañando a una señorita y algún desubicado de los que nunca falta me la campanea… me hago el sota… Más le digo, soy capaz de bancarme que me den unas monedas menos con el vuelto… pero si me miran…ahí le aseguro, no respondo de mi.
SEÑOR 2: Yo, en tren de confesiones le voy a contar que no soy ni manso, ni tranquilo y ni siquiera me gusta Piero… Yo me he callado, lo admito, por respeto al prójimo, en muchos atropellos. Me callé cuando me atropelló un pibe con una bicicleta y me quebró el quinto metatarsiano por respeto a la madre del borrego de mierda, me callé cuando mi madre me mató el pollito que era mi mascota por respeto a la mamá del pollo, me callé cuando eligieron a Menem, por respeto a las cuotas que estaba pagando y me callé cuando me asaltaron por respeto al arma que me apuntaba, pero no me callo y me saca de quicio cuando alguien me mira… porque si.
SEÑOR 1. A los respetuosos los respeto, no le voy a negar… Pero noto en usted cierto tonito sobrador que me está haciendo levantar determinada temperatura corporal… Y así como me ve, ya que tanto me mira, manso y tranquilo como soy, cuando me caliento no hay dios ni diablo que me pare… me he peleado con barras bravas enteras, a puño limpio y corazón contento… mire, para que le quede bien claro… yo bajo ñatos como en el bowling… los pongo en triángulo y hago strike de una piña…y si hay un pibe que me los levanta, hago strike otra vez… Y por mas respetuosos que sean, a los mirones los encaro al medio.
SEÑOR 2: Así como me ve, ya que tanto me mira usted… Yo solito me enfrenté a un equipo de rugby, y para que no hubiese ventaja para nadie, me até la mano derecha a la espalda y apoyé 16 tipos en el try, porque hasta al referee agarré de la calentura que tenía… Y en el tercer tiempo los cachetée uno por uno para que no se olvidaran de que a mi no me mira nadie si yo no quiero… No se si le va quedando claro…
SEÑOR 1: A mi me está pareciendo que el señor me está mirando tanto porque debe tener ciertas inclinaciones que mejor ni menciono… Pero si es así le aclaro: respeto sus preferencias sexuales pero a mi el culo ni el bulto no me lo mira nadie…¿Estamos claros?
SEÑOR 2: Por este cuerpito han pasado tantas mujeres que no le alcanzarían los pelos de su cabeza para contarlas…¿Oyó hablar de Casanova? En mi se inspiraron… Así que no me proyecte sus fantasías sexuales porque a mal puerto está yendo por leña. Es mas le digo, estoy cansado de que las mujeres pasen por mi cuerpo… Pero, a fuer de pueril le pregunto: ¿Cómo sabe que lo miro?
SEÑOR 1: Ah… se me pone sartriano el señor… ¿qué?, me va a hablar de “la mirada del otro”?. Ya se… Usted debe ser uno de esos lauchones de biblioteca que pasan todo por el tamiz de lo libros… ¿Qué? Ahora me va a venir con la boludez habitual de que sin su mirada yo no existo, de que si no hay otro cerca nuestro no podemos saber que existimos, que el otro es nuestra medida y otras pelotudeces por el estilo…Le voy a decir algo para que tome nota y saque punta: en la facultad de filosofía cagué a trompadas hasta al decano y me encamé con todas la minas… don Casanova de cuarta.
SEÑOR 2: Parece que el señor es leído, aunque en realidad me parece por lo que dice que con el conocimiento anda a las trompadas… Es usted el que precisa de mi para saber de su existencia… Su mirada en mi está marcando a las claras su pequeño yo, su pequeño ello… Confirma en su mirarme que usted existe. Necesita de mi para alcanzar una estatura digna lo que demuestra una triste niñez desvalida, una infancia de abandonos y de un padre que en vez de pegarle, lo miraba…¿me equivoco?
SEÑOR 1: El señor tiene muchas horas de psicoanálisis encima, con lo que está demostrando mas traumas que pensamientos… Pero le voy a pasar en alto tal detallito porque ha acertado en algo… es cierto, mi padre me miraba para retarme y me producía miedo, y eso me llevó a odiar a todos los que miran… ¿Pero sabe dónde está mi padre ahora? En el cementerio….
SEÑOR 2: ¿Lo mató?
SEÑOR 1: No, labura de sereno… pero no me jode más con sus miradas, porque sabe que no me gustan…
SEÑOR 2: Yo no quiero perder la calma, le puedo asegurar, pero si usted me sigue mirando le voy a perder el respeto…
SEÑOR 1: Yo ya se lo perdí…
SEÑOR 2: ¿Cómo dice?
SEÑOR 1: Se lo perdí… pero no se haga problemas que está como a 50 metros de acá, y con la piña que le voy a pegar lo va a agarrar a la pasada.
SEÑOR 2: Ya me calenté… Mire, le doy dos minutos para que deje de mirarme… Si al cabo de tal lapso usted sigue con la vista clavada en mi no me va a quedar otro remedio que pedir que deje su documento al costado así cuando termine con usted se reconoce de la paliza que le voy a dar.
SEÑOR 1: Ay, que miedo… Ponga los brazos hacia delante así me hace upa y me acurruca… Mire, no quiero ser agresivo… pero yo a usted lo agarro con el dedo meñique de la mano izquierda, lo tiro para arriba, lo paro de pechito, rodilla, taco, rodilla, y después de la media volea de zurda, lo tiene que desenclavar de la palmera que está a una cuadra…Pelotudo…
(Entra la señora)
SEÑOR 2: ¿Usted me dijo pelotudo… escuché bien?
SEÑOS 1: Si, señor, eso dije…
SEÑOR 2: Mano chica…
SEÑOR 1: Pero por qué no te vas un poco a la puta madre que te parió…
SEÑOR 2: Ah, pero que fino… andate vos a la recalcada concha de tu madre, mirón de mierda…
SEÑOR 1: Pajero…
SEÑOR 2: Forro…
SEÑOR 1: Boludo de mierda…
SEÑOR 2: Te voy a refusilar el ojete a voleos, pelotudo del orto…
SEÑORA: Pero qué vergüenza!
SEÑOR 1: Uy, señora… perdón…
SEÑOR 2: Discúlpeme señora, por este trolo de mierda, no la vi venir… perdón otra vez… Trataré de calmarme…
SEÑORA: Dos señores grandes, elegantes… bien parecidos…
SEÑOR 1: Yo no me parezco a él…
SEÑORA: Bien parecidos… se nota que educados, diciendo esas groserías en medio de la calle…pero qué es ese vocabulario, por favor…
SEÑOR 1: Un desliz, señora, un desliz… No soporto que me miren porque si…Y este señor hace un rato que me clavó la vista y me puso nervioso…
SEÑOR 2: Mentira, el que me miraba era él… Me sacó de quicio, se lo admito… Pero ya pasó, está todo bien…
SEÑORA: Imagínense que por aquí pasaran chicos…¿qué ejemplo le estaría dando con esa conducta, eh? Diga que yo soy una señora mayor, que nada me asombra… pero, además, fíjense por la niñería que estaban peleando… parecen chicos… por favor…
SEÑOR 1: Tiene razón, señora, le vuelvo a pedir disculpas…
SEÑOR 2: Es verdad, de todo corazón, le ruego que me perdone…
SEÑORA: Ahora, de buenas maneras, dense la mano y olviden esta pavada…
SEÑOR 1: La mano..?
SEÑOR 2: A él...?
SEÑORA: Claro, como buenos ciudadanos…
SEÑOR 1: Ni loco…
SEÑOR 2: De ninguna manera…
(Ambos buscan cerca, toman sendos bastones blancos y se alejan del lugar, tanteando con los bastones, como ciegos que son, ante el asombro de la señora)
SEÑORA: Hay cada uno…

FRATERNAL
(En escena Esther, Jorgelina y Marina)
ESTHER: Andá, siempre la misma vos… sos incapaz de quererme como hermana.
JORGELINA: Pero, ¿qué decís, pendeja de mierda?, si siempre te estoy cuidando, protegiendo, impidiendo que te pase algo… desorejada.
ESTHER: Pero, escuchala, mamá… escuchá lo que me dice…
JORGELINA: Si, que mamá escuche bien lo que te digo porque tengo toda la razón, me asiste la verdad…
MARINA: Chicas, chicas…
ESTHER: Decí mamá si es cierto que me protege cuando en la última edición de la maratón me dijo que para llegar más rápido me tenía que comer 4 ajíes putaparió y yo, como ella es mayor le hice caso…
JORGELINA: ¿Y te los comiste?
ESTHER: Claro… igual llegué anteúltima…
JORGELINA: Pero qué mentirosa que es esta pendeja… Contale a mamá, decile, que cuando salimos de safari la última vez, le sacaste la pólvora a todas las balas que yo tenía y cuando quedé mano a mano con el león, ¿qué pasó? ¿eh? ¿Te acordás o no, pendejita?
ESTHER: Nada, qué va a pasar…
JORGELINA: ¿Cómo que nada, si me estropée todas las uñas arañando a esa bestia hasta que la hice correr..?
ESTHER: Qué mentirosa, si fui yo la que te salvé agarrándolo de la cola y revoleándolo por arriba de los árboles… ¿ves, mamá, que es una mentirosa?
MARINA: Chicas, escúchenme un segundo…
JORGELINA: No, mamá, escuchame vos… Esta pendejita, así como la ves… es capaz de cualquier cosa… El otro día llené la pelopincho y vino esta hija tuya… y se la tomó toda, todo porque yo no me metiera, y me dejo toda enjabonada y con la cabeza llena de dentífrico…
ESTHER: Mamá… está mintiendo… enjabonada dice… si no se baña nunca…
JORGELINA: Esperá, que no terminó, mamá… Como me dio un frío bárbaro porque en la pileta no quedaba una gota de gasoil me fui a la biblioteca a leer Todos los fuegos, el fuego…y esta pendeja me los apagó, se puso a soplar así, así… y terminé mirando Lo que el Viento se llevó… y yo ya la había visto en el jardín….
ESTHER: No podés…es una mentirosa, mamá, ya te lo dije… en el jardín solo le mostraban Garganta Profunda… ¿Ves, mamá, que se lo pasa mintiendo?
MARINA: Pero, chicas, porque no me escuchan un segundo?
JORGELINA: No, mamá, vos tenés que saber la verdad de lo que pasa en esta casa cuando vos no estás… Esta pendeja, así como la ves… me corre a todos lo novios… Tengo cuatro y cuando vienen… ¿sabés lo que hace? Les corre carreras hasta la esquina… Me corre a todos los novios… y lo que es peor, les gana…entonces ellos, desmoralizados, se vuelven a sus casas… y yo me quedo acá, solita, vistiendo santos…
ESTHER: Pero contale a mamá que les ponés una ropa horrible… A San Cayetano le pone la ropa de Moyano, a San Roque lo viste de oso del carnaval, y me da miedo… y a que no sabés que hace con San Antonio…
MARINA: ¿Qué hace?
AMBAS CANTAN: Tengo a San Antonio, puesto de cabeza, no me busca novio, ya no me interesa… palo. palo, palo, palo bonito, palo eh…eh…eh… Somos campeones, otra vez…
JORGELINA: Dale campeón, dale campeón, dale campeón, dale campeón…
ESTHER: Este titulo es el resultado del esfuerzo del grupo, estamos muy contentos, es el momento más feliz de nuestra vida… la verdad que estoy muy emocionada… se lo quiero dedicar a todos lo que me quieren…
JORGELINA: La verdad que me siento terriblemente emocionada por haber conseguido este titulo que me llena de orgullo, no cualquiera es campeón nacional de básquet en este época… casi que lloro, vea…
MARINA: Pero chicas, por favor… esto no puede seguir…
JORGELINA: ¿Cómo que no puede seguir? Eso, mamá, es porque no estás nunca en casa, porque no tenés idea de lo que nos pasa, nos has abandonado a nuestra suerte… No, mamá… Tenés que enterarte de todo… Esta pendeja, así como la vez, se lleva todas las materias… reprobó el final de Derecho Romano y no se recibió de abogada y lo peor es que es médica pero por miedo a la mala praxis, no ejerce.
ESTHER: Sos una mentirosa, Jorgelina, bien que te extraje el apéndice la semana pasada cuando te dolía la cabeza… y ni me lo agradeciste…
JORGELINA: Mentira, mamá, mentira… Es cierto que me dolía la cabeza, pero era por culpa de ella, porque me leyó la Odisea de Homero en una hora… ¿te fijaste a la velocidad que habla? Y me hizo doler la cabeza y a la que operó fue a la vecina, y no fue de apéndice, de hecho ya no es mas nuestra vecina, sino nuestro vecino.
ESTHER: Pero qué chica tonta… Solo porque es mi hermana mayor no le voy a permitir que diga cualquier cosa… Yo la respeto y la quiero, pero no tanto como para aceptar que me trate como a una basura…
JORGELINA: ¡Qué resentida! Ya se por qué decís eso… Se acuerda de cuando tenía 5 años y la guardé en la bolsita de residuos y la saqué a la vereda… Pero no te podés quejar… Te hiciste un paseo bárbaro por toda la ciudad en el carro basurero… Y los señores que juntan la basura te trajeron de vuelta, casi sana, y casi salva…
ESTHER: No fueron los señores de la basura, mamá… El que me trajo de vuelta fue un perro que encontró la bolsa tirada conmigo adentro y me estaba por comer…
JORGELINA: ¿Y por qué no te comió, a ver? Contale a mamá por qué no te comió…
ESTHER: Porque vos no me habías echado sal… qué viva… así cualquiera…
JORGELINA: No te eché sal porque soy buena… cualquier otra hermana lo hubiese hecho con tal de sacarse tal plomo de encima.
MARINA: Les pido por favor, chicas, denme un minuto… solo un minuto, dejenme decir lo que tengo que decir…
JORGELINA: No, mamá… espera que hablemos nosotros primero… vos hablaste toda tu vida ya, es tiempo de dejarle paso a las nuevas generaciones… Yo seré madre un día y ¿cuál será el ejemplo que lleve si vos no me dejas hablar?
ESTHER: Ahí tiene razón ella, mal que me pese… Tenés que cedernos la palabra y la acción a nosotras… ¿Qué hicieron con su tiempo, eh, mamá?
JORGELINA: Con tus palabras creaste la polución, el calentamiento global, la bailanta y gran hermano… me parece que tu generación ha perdido el derecho a la palabra.
ESTHER: Somos nosotros, los jóvenes, mamá, la esperanza del futuro… Volveremos al sistema feudal, a las cortes, a los carruajes tirados por caballos y a las pinturas rupestres.
JORGELINA: ¿Te das cuenta, mamá? Tu tiempo de hablar ya pasó…
ESTHER: Fuiste, sos pasado…
AMBAS CANTAN: Hubo un tiempo que fui hermoso
Y fui libre de verdad
Guardaba todos mis sueños
En castillos de cristal…
JORGELINA: La cazaste, mamá?
ESTHER: Entendés, mamá?
MARINA: Chicas…
JORGELINA: Insiste… qué pesada…
ESTHER: (Tapándose los oídos) No te escucho, no te escucho…
MARINA: ¡Chicas!
JORGELINA: No seas densa, vieja…
ESTHER: Bajá un cambio… ya cansás…
MARINA: ¿Saben qué? Se pueden ir las dos al carajo… Me hartaron, me pudrieron… Estoy podrida…
JORGELINA: ¡Mamá!
ESTHER: ¡Vieja!
MARINA: Mamá las pelotas… yo no soy la mamá de ustedes, par de locas… son insoportables, ningún manicomio les alcanza… Puré de locas habría que hacer con ustedes… Es la tercera vez que vengo a esta casa de locos a cobrar la cuenta de la escuela de teatro… Váyanse al carajo… (Se va)
ESTHER: Zafamos otra vez…
JORGELINA: Vamos a tener que inventar otra cosa para no pagar, Esther… Esto se pone cansador…
ESTHER: Pero al menos, zafamos.
JORGELINA: Eso si… Avisale a mamá que puede salir, ya nos sacamos de encima a otro cobrador.

VARIACIONES SOBRE EL CRIQUET
(En escena Betty y Marilina)
BETTY: Te juro que tengo los nervios de punta…
MARILINA: La verdad que no es para menos.
BETTY: Justo hoy, que me faltan dos días para empezar las vacaciones, justo hoy que es miércoles y el día en que me toca con mi marido… porque yo lo programo, viste…justo hoy nos tiene que llamar la forra esta de Elida…
MARILINA: A mi lo que me preocupa es que nos llame la jefa de personal y no el gerente, es preocupante la cosa, ¿no?
BETTY: Pero claro… porque mirá que la Elida esta es una arpía, si entramos juntas a laburar acá, y ella empezó a trepar a trepar… y mirá dónde está…Porque seguro que no fue por mérito propio, te lo digo yo que la conozco de años… Esa es jefa de personal gracias a su lleva y trae permanente… ¿No la viste como se pasea por la oficina, con esos aires de superioridad, controlando todo? Se sonríe, se sonríe, pero se fija en todo, la turra… Si no hay laburo…¿qué problema tiene en que lea la Caras en ese ratito? Pero no, te mira, mira la revista con esa sonrisita, no te dice nada y la tenés que guardar y hacer como que trabajás… porque si no, la muy jodida, le alcahuetea todo al gerente…
MARILINA: Y, el que sabe, sabe, y el que no sabe es jefe.
BETTY: Tal cual… Ahora… para qué nos llama a las dos justo hoy, decime…
MARILINA: La verdad, no tengo ni idea…Pero no ha de ser nada bueno, ¿no te parece…?
BETTY: (Imitando a Elida) Betty, Marilina, quédense un rato después de terminar el trabajo de hoy, que tengo que charlar con ustedes, chicas… No la aguanto, te juro que no la aguanto.
MARILINA: ¿Por qué tardará tanto?
BETTY: Para darse ínfulas, qué te pensás. Ella nos tiene que hacer esperar para dejarnos en claro que está en una posición superior. Pero cuando entró, jovencita era…bueno, yo también… pero era una mosquita muerta. Calladita, en el rincón más intrascendente de la oficina… Yo me trataba mucho con ella entonces… Y te digo más, el puesto que tiene ella, era para mi… Pero me cagó, la muy turra me cagó, andá a saber cómo… Y ahí la tenés, ahora nos hace la amansadora de la espera para demostrar lo importante que es.
MARILINA: Che… yo escuché comentarios de que la mano viene medio jodida acá…
BETTY: ¿Si?
MARILINA: Si, me comentó Damián que le había dicho el chico que trae la correspondencia que había escuchado una charla en el café de al lado, en que alguien dijo que la oficina estaba complicada…
BETTY: Entonces nos quieren echar.
MARILINA: ¿Te parece?
BETTY: Pero seguro, querida, seguro… Aunque no entiendo como vos no te proteges y movés un poquito tus influencias…
MARILINA: ¿De qué influencias me hablás?
BETTY: No me vas a decir, Marilina querida, que no te diste cuenta cómo te mira el gerente…
MARILINA: Ese mira a todas…
BETTY: Pero a vos, ni bien pasás, te clava la vista en el culo y te lo sigue hasta que te vas… ¿Vos decís que a mi también me mira?
MARILINA: A cualquiera, mira a cualquiera, es un verde…
BETTY: Bueno, no se vos, pero yo, no soy cualquiera. (Pausa)
MARILINA: Cómo tarda…
BETTY: Ya te dije, para hacerse la importante… Pero vas a ver… en un ratito llega, toda sonriente y nos dice: Cómo les va chicas, lamento mucho que me hayan tenido que esperar, pero son cinco minutitos nomás…
MARILINA: Te sale igualita…
BETTY: Si la conoceré, te va a mirar y te va a decir: Marilina, preciosa, qué linda que estás… no sabés lo bien que me hace verte trabajar como trabajás… no sabés lo bien que le hace al gerente que le muevas el culo como se lo movés cuando pasás por al lado, no sabés lo bien que nos hace a todas las que trabajamos acá y somos mayores que vos, verte a vos, tan linda, tan joven… por eso mismo, mi querida Marilina, pendeja de mierda, te vamos a poner tu lindo culito en la puta calle a partir de ahora…(Pausa)
MARILINA: Yo creo que no, que primero te va a saludar a vos…si se conocen de hace muchos años… son casi de la misma edad, vos lo dijiste…Te va a decir: Ay, Betty, querida, discúlpame que me haya demorado, pero estaba alcahueteándole cosas al gerente… A Mario… a ese mismo que vos le tenés tantas ganas pero no te da ni cinco de bola porque prefiere a una mas joven como Marilina, no te pongas verde, Betty, querida, se te nota la envidia… y en este lugar la envidia no es bien recibida, así que a partir de ahora vamos a poner tu envidioso culo en la puta calle… Betty, mi vida…
BETTY: No, ella no me va a decir eso a mi… No de esa manera… ¿sabés qué? No me gustó mucho lo que dijiste… Me pareció que me estabas mandando una indirecta…
MARILINA: ¿Yo? De ninguna manera, sólo me imaginaba lo que nos iba a decir Elida…
BETTY: Esa arpía… Aunque no se, capaz que no viene a echarnos… A lo mejor sólo nos viene a pedir que trabajemos unas horitas extras mas, pero sin pagarlas… Chicas, hay que ponerse la camiseta de la empresa, estamos pasando momentos duros…Hay que hacer un esfuerzo para conservar la fuente de trabajo… Pero ¿sabés qué? Ni en pedo, así te lo digo… Las horas, los días, los meses de mi vida que le he regalado a este lugar y todo para qué… Para que cuando me tocaba a mi el ascenso apareciera esa víbora y me robara lo que era mío.
MARILINA: Yo tampoco le hago horas extras, te aclaro, si es eso lo que piden.
BETTY: ¿No? Pero qué raro… si a mi me parece que te quedás unas cuántas horitas por semana ayudando al gerente…
MARILINA: ¿De dónde sacaste eso?
BETTY: No se, me pareció… he visto tu motito afuera a altas horas…
MARILINA: Pero eso debe haber sido la vez que perdí la llave y la tuve que dejar en la puerta hasta el otro día…
BETTY: Pero no, querida, es una broma nomás… No te pongas mal… Además cada quien hace con su culo lo que quiere… no digo que vos lo hagas, pero si lo hicieras, es tu problema… Mirá que yo me voy a andar preocupando si te curtís al gerente o no…
MARILINA: Tenés toda la razón, es mi problema…
BETTY: Pero… ya que estamos… ¿salís con él?
MARILINA: Como vos dijiste, ese es mi problema…
BETTY. Cierto… Pero, che, qué falta de respeto hacia la gente, mirá el tiempo que hace que nos tiene esperando esta mujer, ¿quién se ha creído que es?
MARILINA: La verdad que tenés razón, ya estoy podrida de esperar, si no viene en cinco minutos me voy a la mierda…
BETTY: Y yo atrás tuyo, querida… No se quienes se creen algunos, porque tienen un poquito más de jerarquía, dos guitas mas que nosotros ganan… y mirá, hay que esperarla como si fuera una reina…
(Ingresa Elida)
ELIDA: ¿Cómo les va, chicas?, lamento mucho que me hayan tenido que esperar, pero son cinco minutitos nomás…
BETTY: ¿Qué te dije?
MARILINA: Textual…
ELIDA: Lo que pasa es que justo me llamaron de la oficina central, y les tuve que habilitar el fax para que me pasaran unos informes, y bueno, vieron que no es fácil que esos faxes kilométricos pasen de una, así que me llevó todo este rato… Pero bueno, pido disculpas por el tiempo que les he hecho perder y paso al asunto por el que las he citado…
BETTY: ¿Viste?
MARILINA: No se puede creer.
ELIDA: Chicas, la empresa…
BETTY: La empresa, vos, la camiseta de la empresa, se pueden ir a la puta madre que lo parió… Me cansé… trepadora… arpía… (se va)
ELIDA: Pero, ¿qué le pasa a esta mujer?
MARILINA: Mirá, querida, si la empresa anda mal, que se joda, yo también me harté. Estoy hasta acá de todos los quilombos de este lugar… yo también me voy al carajo… no te voy a dar el gusto… Ah, y si me encamo con el gerente… es mi problema, no el tuyo. Chau.
(Elida queda anonadada)
ELIDA: Y todo los que les iba a decir es que las dos tenían aumento de sueldo…

EL ROBOT

(Ingresan Marisol y Diana)
MARISOL: Vos sabés, Diana querida, que soy una mujer fashion… No se, podrán criticarme, hablar mal de mi a mis espaldas, pero lo llevo en la sangre, lo llevo como se llevan las llaves en el llavero, como la lluvia en la llanura…¿viste?
DIANA: Ya se, sos un divina… lo tengo claro… pero, ¿a qué viene este introito?
MARISOL: ¿Qué dijiste?
DIANA: A qué viene este introito…¿por?
MARISOL: Ah, picarona… otra cosa te había entendido… Introito es como, nada, comienzo, ¿no?
DIANA: Si…inicio, introducción, prólogo en tu caso…
MARISOL: Bueno, mi dulce, el otro día estaba aburrida en casa… aburrida de llevarme divina como siempre y me dije: Marisol, ¿qué hacer en un día como este? Entonces… salí de shopping, gordi…
DIANA: Lo que hacés siempre…
MARISOL: Si, pero esta vez estaba tan pero tan depre de ser tan feliz que pensé en hacer una compra muy, pero muy especial… y me la hice… la hice, Diana, la hice, reina, divina, no te podés imaginar lo que me compré…
DIANA: ¿Qué te compraste, corazón? Una cuatro por cuatro, un velero, un planeador, un vibrador, una isla… ¿qué?
MARISOL: Pero, gorda, tengo todo eso… no, me compré un robot…
DIANA: ¿Un qué?
MARISOL: Un robot, Diana, un robot, una de esas máquinas que parecen seres humanos pero no lo son… ¿querés verlo, querés verlo?
DIANA: Lo tenés acá?
MARISOL: Pero claro, querida, esa es la idea, tenerlo, mostrarlo, dar envidia, hacer que el mundo me desee por lo linda y fashion que soy…
DIANA: ¿A verlo?
(Marisol golpea un par de veces sus manos e ingresa el Robot)
DIANA: Ay, pero parece una persona….
MARISOL: Viste, gorda, es divino, divino, divino…
DIANA: Como se llama?
MARISOL: Yo todavía no le puse nombre… es el modelo PIN 9, obvio que el último, me ofrecieron el PIN 8 pero yo les dije que no, parecía de madera, ¿viste? Así que yo le digo PIN9 o negrito, depende como me agarre el día…
DIANA: ¿Y qué hace?
MARISOL: De todo, es genial, es recompleto… es lo mas…
DIANA: ¿Y cómo se maneja?
MARISOL: Se lo habla… le das la orden…
DIANA: ¿En serio?
MARISOL: ¿Quéres ver?
DIANA: Dale…
MARISOL: PIN, saludá a mi amiga…
PIN9: Hola, amigo de Marisol…
DIANA: Impresionante…
PIN9: Hola, señora Impresionante, amiga de Marisol…
DIANA: ¿Eh?
MARISOL: Tenés que tener cuidado con lo que decís cuando se activa, es medio literal.
DIANA: Hola, PIN9…
PIN9: Hola, señora Impresionante, amiga de Marisol, pero no me rompa las pelotas que ya la saludé…
DIANA: ¿Eh?
MARISOL: PIN, PIN, PIN, portate bien, no le digas a esas cosas a mi amiga…
PIN9: Usted está equivocada, nunca dije eso…
MARISOL: ¿Qué?
PIN9: Esas cosas…
MARISOL. ¿Qué cosas?
PIN9: Me acaba de decir que no le diga esas cosas a su amiga, la señora Impresionante, y en ningún momento le dije esas cosas…
MARISOL: Bueno, bueno, pincito, cortala, ¿si?
PIN9: Comprendido (se abalanza sobre Diana)
DIANA: ¿Qué hace este bicho?
PIN9: Procedo a cortar a la señora Impresionante, tal como la señora Marisol lo ordenó.
DIANA: Paralo que me corta…
MARISOL: Stop…Detente… Decí un poema, PIN9, alegranos un poco…
PIN9: Poesía, comprendido…
El sol brilla cual brasa, en el cielo de mi tierra
El sol que todo ilumina y el paisaje con el arde,
Protégete de sus rayos que parecen una guerra
Que si no te vas a quemar hasta la concha de tu madre…
DIANA: Lindo poemita…
MARISOL: No me vas a decir que no es divertido, solo es cuestión de ser precisos en lo que se le dice…sino obra como un zafado.
PIN9: Zafado, comprendido…
DIANA: Pero tenés que tener cuidado… es un peligro este aparato…
PIN9: Yegua…
MARISOL. ¿Qué le pasa, ahora?
PIN9: Turra… Vengan y pónganse en cuatro…
MARISOL. ¿Qué hacés?
PIN9: Pin9 se zafa, tal como su ama lo ordenó. Par de yeguarizos… Quiero removerles el almacigo y regarles las begonias... Quiero partirles los melones, y visitar todos los agujeros de sus huertas para plantarles las semillas calientes.
MARISOL: Stop… Basta…
DIANA: Ay, Marisol, creo que me puse colorada… ¡qué vergüenza!
MARISOL: Te voy a decir la verdad, nunca se había comportado así… Yo lo voy a llevar de vuelta al negocio donde lo compré y les voy a pedir que me restituyan el dinero… y si no lo hacen, los voy a meter en flor de baile…
PIN9: Flor de baile… comprendido… Música, maestro…(se pone a bailar frenéticamente, y arrastra con él a ambas mujeres, que primero bailan sin comprender muy bien y luego comienzan a huirle, formando una especie de ronda)
MARISOL: Que porquería de robot…
DIANA: Hace algo, Marisol, andá a saber lo que nos hace este bicho si nos agarra…
MARISOL: Stop…Basta… Dentente… Vade retro…
DIANA: No te hace caso…
MARISOL: No sabe con quién se metió, lo voy a hacer cagar a este aparato…
PIN9: Cagar, comprendido…(amaga a bajarse los pantalones)
MARISOL: ¡Basta, carajo! (el robot se detiene)
DIANA: Menos mal… se detuvo al fin…
MARISOL: Pero qué inmundicia, este robot es el colmo de lo ordinariez… Ahora mismo lo desactivo y lo llevo de vuelta… Así no se puede…
DIANA: Tenés razón… es un peligro para vos y para cualquiera que te ande cerca… ¿Y sabés cómo se desactiva?
MARISOL: Claro… Es como un conjuro… son una serie de órdenes. Ya vas a ver cómo lo dejamos hecho un montón de fierritos y tornillos…
DIANA: Dale…
MARISOL: PIN9!
PIN9: Ordene, señora Marisol.
MARISOL: Desconectar mecanismos!
PIN9 (Desestructurándose) Mecanismos desconectados…
MARISOL: Comenzar a apagar células neuronales…
PIN9: Células neuronales desconectadas…
MARISOL: Proceder a la desactivación…
PIN9: PIN9 procede a la desactivación…(Comienza a desarmarse corporalmente muy lentamente… extiende su mano derecha y queda quieto)
MARISOL: ¿Viste? Una pavada (Repentinamente PIN9 se recupera, hace un corte de mangas y huye corriendo de la escena)
PIN9: Váyanse a cagar, conchetas de mierda…
DIANA: ¿Viste lo que nos dijo?
MARISOL: Que porquería de compra… no sabés el quilombo que les voy a hacer a los del negocio…¿te das cuenta?
DIANA: Una vergüenza…
MARISOL: Mirá que a mi, justamente a mi, me vengan a vender un robot socialista!

LA MAQUINA
(Muy formalmente, ingresa el Inventor)
INVENTOR: Señoras, señores… quienes han venido hasta aquí, sabían para que venían, lo han visto en la publicidad que puebla las calles, lo han escuchado en las radios, lo han visto en la televisión, lo han consultado en internet, en fin; por múltiples medios han sabido que esta noche, y a partir de este momento iba a exponer mi último y mayor invento: la máquina de la verdad. Señores, la mentira se detecta fácil y es parte, ella misma de toda nuestra vida, aún cuando tendemos a negarla y el corazón se acelera, y las pupilas se agrandan cuando decimos una… Por eso fue relativamente sencillo fabricar el detector de mentiras… Por eso, investigando y profundizando en la psiquis humana, llegué a la conclusión de que la verdad genera una corriente electromagnética más que importante, a partir de esto fue también sencillo realizar esta máquina fabulosa, que implicará un salto cualitativo en las relaciones humanas… La máquina de la verdad! (Señala hacia un lateral. Pausa) La maquina de la verdad! (Idem) Asistente! (A la carrera ingresa el asistente) Cuando yo digo: La máquina de la verdad, usted entra inmediatamente con ella… ¿entendió?
ASISTENTE: Si, señor, si.
INVENTOR: Vamos a proceder…
ASISTENTE: Si, señor, si, señor, si, señor, si.
INVENTOR: Con un solo “si, señor” me basta.
ASISTENTE: Con un solo si señor, si.
INVENTOR: Basta, tonto… Vaya fuera de escena… Señores… señoras…pidiendo disculpas por este pequeño detalle, ahora si… acá está… La Máquina de la Verdad…(Ingresa el Asistente portando un objeto que termina en una lamparita común, lo coloca sobre una mesa) Mi asistente la pondrá en funcionamiento y ustedes podrán percibir el leve zumbido de sus capacitores en funcionamiento, prestos a captar las ondas que cuánta verdad se diga en este espacio generen…(El asistente que intenta poner en funcionamiento la máquina se queda unos instantes parado al lado de ella, hasta percibir que no emite ningún zumbido, primero disimuladamente, y luego en crescendo intentará hacerla arrancar, probará con los métodos más insólitos, zamarreandola, con martillo, serrucho, etc, aunque se las arreglará para que cada vez que el inventor gire hacia la máquina, él estará parado al lado de ella como si todo marchara normalmente) Hemos crecido rodeados de mentiras, o al menos, de falsas verdades… Estoy seguro que todos los presentes alguna vez recibieron esta recomendación: “No comás sandía y tomés vino, porque se te hace una piedra en el estómago y te morís”: Falso, señores… Invento de alguno que no le gustaba el vino o la sandía… Para experimentar comí infinidad de sandías y bebí miles de litros de vino, y aquí me tienen, vivito y coleando. Pero he de decirles que mi amor por la verdad, o si quieren mi odio a la falacia, nació cuando yo era pequeño… Todo el tiempo mis amiguitos me decían que “ el que come y no convida, tiene un sapo en la barriga”. ¿Qué hice entonces? No le convidé nada a nadie, nunca más… Y pasé las noches, en la oscuridad tratando de sentir aquel sapito agitándose en mi interior… Yo, de niño, se los digo, soñaba con ser madre o padre de un hermoso y gélido sapito verde… Y ¿qué sucedió?: la frustración me llevó a años de terapia, a traumas que recién ahora estoy resolviendo…Nada de eso hubiese sucedido si mi Máquina de la Verdad hubiese existido entonces… Como les digo, vivimos rodeados de falsas verdades, en la línea de la anterior está aquella de “si tomás agua después de correr, te da un pasmo y te morís”. Falso, señores, falso de toda falsedad… He calmado mi sed con un litro de agua helada tras un agotador partido de fútbol tantas veces como recuerdo, y acá me ven. Ni qué decir de la cucharita en la botella de coca o de cerveza, que según decían impedía que se escapara el gas…Falso… el dióxido de carbono solo permanece en el liquido por equilibrio de presión… ¿Por qué entonces, gentes de mal hacer nos han hecho hacer el ridículo durante años guardando la gaseosa con la cucharita adentro de la heladera? ¿Qué extraños poderes, y con qué objetivos, se mueven detrás de tales falacias? No importa ya esta sinarquía internacional, la descubriremos en cada dislate con nuestra portentosa Maquina de la Verdad… Hablando de gaseosas, quien no recuerda otra falsa verdad, generadora también de traumas: “si le das a una mujer coca con geniol le agarra tal excitación sexual que quiere hacerlo ya mismo con vos”. ¡Qué crueldad para con el género masculino, señores! Y esto seguro que muchos de los caballeros presentes son solidarios por experiencia con mis palabras… Las cosas que hemos hecho para mezclar ambos elementos sin que la susodicha se enterara…¿y? Nada, señores, nada. Pero una nada cruel y densa que nos dejaba preguntándonos en qué habíamos fallado…
Pero también nuestras antagonistas, el siempre amable y poético género femenino, carga con sus falsas reglas… Qué mujer no escuchó alguna vez aquello de “no te bañes con menstruación, porque se te retira”… Señoras… si me permiten el exabrupto, ¿qué tiene que ver el culo con la cabeza?, o peor aún, este otro aserto rayano en el absurdo: “no batan mayonesa con la susodicha menstruación, porque se corta la mayonesa”… señoras… la eliminación de líquidos corporales inútiles, que no otra cosa son las reglas, es simplemente eso… ¿Por qué esta asociación con un instrumento filoso? ¿Es que esa sangre inútil es mas dura que el diamante y todo lo corta? Ninguna de estas barbaridades hubiesen sido posibles si hubiese existido esta portentosa Máquina de la verdad… ¿Cuántos cogotes de pollo me comí, porque me dijeron que si lo hacía me peleaba con mi suegra? Y nada… nunca nada de eso…
Nos han dicho también, y si hay oídos sensibles o de moralidad un poco retrógrada, ruego que sean tapados, sea por manos propias o extrañas…nos han dicho también decía que “el tamaño no importa”… que la mujer solo es sensible en los primeros cinco centímetros de su vagina… que la excitación se produce en el clítoris… mentira… todos lo sabemos… es mentira… Las mujeres mueren por los dotados lo que deja al resto de los mortales en un estado de indefensión tal, que pululamos por los consultorios psicológicos para que nos vuelvan a decir la misma falacia…
Señores, podría seguir toda la noche…podría cansarlos recordando tantas cosas, desde que “el tiempo todo lo cura”, pasando por “los petisos son todos agrandados”, siguiendo por lo de “las solteronas son todas amargadas” o hasta “un rayo no cae dos veces en el mismo lugar”
No se, insisto, qué extraña conspiración ha hecho que nuestra sociedad se maneje de mentiras o falsas verdades… pero todo, todo eso acabará a partir de ahora gracias a este, mi sueño, mi quimera, mi mas grande realización… La Maquina de la Verdad…
(La señala… El asistente está parado al lado de ella como si nada hubiese sucedido)
¿Se encendió la lámparita que percibe las ondas electromagnéticas en algún momento de mi disertación?
ASISTENTE: No, señor, no.
INVENTOR: He aquí la más clara, la mas potente demostración de la fiabilidad de mi invención… señores… señoras… en este rato no he dicho mas que mentiras… por lo tanto lo opuesto son verdades… (Al decir esto mira la máquina esperando que se encienda) Es una verdad entonces que he dicho puras mentiras (La máquina sigue apagada) Discúlpenme, señores… Mi propia máquina me ha hecho entrar en crisis, estoy inmerso en una terrible contradicción… Esto quiere decir, que algo de lo que he dicho era verdad, aunque la máquina no se encendió… porque si dije que había dicho puras mentiras y no se prende… quiere decir que algo de lo que dije es verdad… pero ¿qué? ¿el geniol? ¿el tamaño? ¿la menstruación? ¿la cucharita? ¿el cogote de pollo? ¿qué? (sale apesadumbrado y murmurando… al desaparecer de escena el asistente descubre que la máquina nunca había sido enchufada y muestra, entre culpable y sonriente, el enchufe al público. De afuera el inventor grita)
INVENTOR: ¡Asistente!
ASISTENTE: Si, señor, si (corriendo tras él)

ZOILO Y ZENON
(sobre textos de Roberto Fontanarrosa)
(El Zoilo está tomando mate. Ingresa el Zenón)
ZENON: Güenas y santas, ando buscando al… pero, ¿usted no es el Zoilo Alfano?
ZOILO: De cuerpo presente, y usted es el Sargento Zenón Iberra, nos conocimos en milicia.
ZENON: Es cierto, no lo había reconocido vestido de paisano.
ZOILO: ¿Y de que quiere que ande vestido, de tirolés?
ZENON: Ando detrás del Epitafio Quejumbre, desertó del fortín.
ZOILO: Epitafio Quejumbre! Mire que yo he conocido gente triste, pero ninguno como ese cristiano que pasara a mejor vida a manos de los guerreros de Pincén.
ZENON: ¿No me diga?
ZOILO: Hasta los crespines lo gambeteaban para que no les contagiara la melancolía, desde Paraguay llegaban becados los urutaús pa’ aprender a llorar con el Epitafio.
ZENON: Debía de ser un hombre peligroso el Epitafio, parece que le decían la Fiera.
ZOILO: No, ansina le decían a la esposa. Pa’ verla a ella fue que juyó del fortín, y ahí jué cuando los pampas lo emboscaron y lo despenaron.
ZENON: Vida desgraciada, la del Epitafio. Tenía que morir ansina, el pobrecito.
ZOILO: ¿Quién le dijo que murió? Los indios lo despenaron. Le sacaron las penas. Los llevaron pa’los toldos y con vino chinche, empanadas, música y algunas indias juertonas, lo alegraron de lo lindo al Epitafio.
ZENON: Jue pucha.
ZOILO: Yo me acuerdo que usted era el mejor asador del país.
ZENON: Y, en materia de asado, quien dice del país dice del mundo.
ZOILO: Me gustaría que me hiciera una choriceada.
ZENON: ¿Cuántos cristianos son?
ZOILO: Diez mil, es una comida partidaria.
ZENON: Endijpué de un partido de fútbol? ¿Cinco mil contra cinco mil?
ZOILO: No, un partido político.
ZENON: ¿De qué tendencia son?
ZOILO: Somos un partido moderado, popular.
ZENON: Los chorizos, digo yo. Tienen tendencia a chorrearse, son escupidores. Porque el comportamiento del chorizo es fundamental. Usted más que un parrillero, necesita un estratega, un general, alguien con don de mando para controlar esa multitud de embutidos. He visto reventar a un chorizo de grasa y dejar ciego a un concejal. Hay longanizas prohibidas por defensa civil. Lo mío es muy comprometido, amigazo. Conozco a un político que perdió su banca en el Senado por una molleja cruda.
ZOILO: ¿Y qué necesitaría?
ZENON: Carbón, medio yacimiento, y quiero decir un discurso antes del asao… Hablarle al pueblo, a esa gente que tiene hambre. Decirles: En esta parrillada comerán los mejores chinchulines, las mejores morcillas, el mejor lomo y el mejor matambre que se hayan comido jamás en nuestra patria.
ZOILO: Pero acuérdese que solo habrá chorizos…
ZENON: Es pa’que la gente se vaya acostumbrando a que no tuito lo que se promete, se cumple.
ZOILO: Y, ¿si habla después del asado?
ZENON: Es que prefiero prometer a justificarme.
ZOILO: Ta güeno.
ZENON: ¿Y qué anda haciendo usté por estos pagos?
ZOILO: Me voy pa’ las tolderías.
ZENON: Ave María Purísima, ¿y por qué?
ZOILO: Mi actividad política. Me robé una urna eleccionaria.
ZENON: ¿Pa’qué?
ZOILO: Pa’urna funeraria. No tenía plata para enterrar a mi tío pisao por un carro. El trabajo que me costó meterlo al pobrecito por la ranura y, pa’colmo, en el Camposanto, me la impugnaron.
ZENON: Yo ya estuve allá.
ZOILO: ¿Y cómo fue que lo aceptaron a usted los pampas?
ZENON: Ellos tenían una deuda conmigo. En un malón se llevaron cautiva a mi mujer.
ZOILO: ¿A la gorda?
ZENON: Esa mesma. Entre 14.000 salvajes se la llevaron alzadas. De otras tribus vinieron a ayudar. Hasta comanches había. Ahí fue donde se hernió el cacique Inguilén, que en mapuche quiere decir Braguero Bravo. Y después tuvieron que rogarme pa’que aceptara a mi mujer de vuelta. Les había comido hasta los quiyangos. Y a usted, ¿qué lo empuja pa’los toldos? Mire que es muy jodido allá. Beben sangre de yegua, jeden a zorrino, comen vinchucas.
ZOILO: Lo que pasa es que pa’un joven como yo, acá no hay trabajo. Vea usted: Martín Fierro se jue pa’ los toldos y se hizo famoso. Si no se iba, capaz que quedaba en proyecto editorial, nomás.
ZENON: Mire que los pampas aura, no le dan la visa a cualquiera.
ZOILO: Tengo un abuelo ranquel, eso facilita el trámite.
ZENON: Tengo que confesarle algo…usted ya sabe que no hay asador como yo.
ZOILO: Ahá.
ZENON: Me he hecho vegetariano.
ZOILO: No me mire, aléjese, no quiero que endijpué yo ande por la calle y me digan: Ahí va el amigo del vegetariano. Eso no es pa’un argentino. Hienas paridas a la hora del asado con cuero, pirañas caníbales ante el cuadril ubérrimo y el costillar vacuno. ¿Qué tiene contra las vacas, que le ha hecho el noble asado, el rumiante primigenio? Bestias tiernas que tienen que dirse del país pa’triunfar.
ZENON (llorando) Perdóneme, fue un momento de debilidad.
ZOILO: ¿Y cómo no va a estar débil, si anda comiendo esas porquerías?
ZENON: ¿Sabe usted que yo no me lavo las manos?
ZOILO: ¡Qué asco! ¿y por qué?
ZENON: Con esta mano le di la mano a Juan Moreira.
ZOILO: Lávese la izquierda, por lo menos.
ZENON: ¡Con la izquierda le palmee el hombro!
ZOILO: Vea usted.
ZENON: Y hace dos meses que no me baño, desde que lo abracé a Segundo Sombra, porque somos tuitos de la misma promoción: Segundo Sombra, Santos Vega, Hormiga Negra, egresados del INTA.
ZOILO: ¿Y usted tiene algún parentesco con Martín Fierro?
ZENON: Puede ser. Mi tatá siempre me decía que se había echado un fierro por algún lado.
ZOILO: ¿Pero por qué le tiene tanta ojeriza al agua? Diga…
ZENON: Por el recuerdo de mi bisabuelo.
ZOILO: ¿El indio?
ZENON: No, el que vino del viejo continente.
ZOILO: ¿Uropa?
ZENON: No, la Atlántida. El continente que se hundió. Mi bisabuelo se vino a tiempo. Empezaron a aparecerle manchas en el rancho, y el se creiba que era humedad en los cimientos- Y era la mar que le estaba garroneando la casa. Mi bisabuelo había cavado un aljibe y dijeron que por ahí entró el agua que inundó tuito! Por culpa de él se hundió un continente, ningún presidente logró algo parecido. Por eso ni el agua bendita acepté p’al bautismo. Con dulce de membrillo tuvieron que bautizarme.
ZOILO: Con razón.
ZENON: Oiga, don Zoilo, este mate está lavao, cámbiele un poco la yerba.
(Sale como para hacerlo y grita desencajado)
ZOILO: Dios mío, una cucaracha!!
ZENON: ¿Y qué esperaba encontrar, una cebra?
ZOILO: ¡Mátelas, que les tengo pánico, don Zenón!
ZENON: Se rompe la cadena ecológica.
ZOILO: Ese bicho no juega ningún papel en esa cadena…
ZENON: ¿Qué no juega? Tírele usted un palito, una pelotita, un osito de felpa, y verá como juega la pobrecita, más si es cachorra.
ZOILO: Usted también tiene miedo, Zenón, y ese insecto no puede asustar a dos cristianos.
ZENON: Cristiano, budista, musulmán, rosacruz, cualquiera se atemoriza. Porque una cosa es hablar de la cucaracha y otra encontrarse con el animal en persona.
ZOILO: Mire, como sargento que es, mate la cucaracha o le parto el mate en la cabeza.
ZENON: De mi, por buenas va a conseguir mucho… ahora, por las malas, va a conseguir todo. Además dicen que es un ortóptero muy limpio, di seguro que llevaba una toallita al cuello… iba p’al baño. Y no es timor, es rispeto. Es uno de los bichos mas viejos de la tierra.
ZOILO: Si no lo echan pa no pagarle antigüedad (Van hacia el lugar)
ZENON: Ahí está, la cucaracha es como la poesía. Ha superado todo. Maremotos, terremotos, guerras, epidemias, despedidas de soltero. La cucaracha es eterna, nada la mata, nada la extermina. Le via a hacer una demostración práctica y audiovisual.
ZOILO: ¡Guarda que puede estar rabiosa! (Zenón la mata de diversas maneras. Ambos se acercan con mucho recelo)
ZENON: Ahora verá, igual que el bíblico caso del piojo resucitado.
ZOILO: La hizo bosta, don Zenón.
ZENON: Puede estar fingiendo.
ZOILO: No se mueve, no respira, no da señales vitales.
ZENON: Otro mito que se derrumba.
ZOILO: Otro ídolo con pies de barro.
ZENON: Un nuevo invento de las revistas.
ZOILO: Venga, vamos a matear a otro lao.
ZENON: Eso, no sea que vengan las hermanas (se van)

No hay comentarios:

Datos personales

Nombre y apellido: Duilio Olmes Lanzoni Fecha de nacimiento: 3 de Julio de 1962 Bolívar pcia. de Buenos Aires Dirección: Alvear 325 Bolívar TE. (02314) 42-4095 // 15416051 // E-mail: duiliolanzoni@speedy.com.ar